Nace en Zapatoca (Santander), el 23 de octubre de 1918, recibe la Ordenación Sacerdotal de manos de Monseñor Luis Andrade Valderrama o.fm, Obispo Auxiliar de Bogotá el 7 de diciembre de 1941; estando ejerciendo como rector del Seminario Mayor de San Gil, fue nombrado Obispo por el Papa Juan XXIII y consagrado en la Catedral de San Gil por Monseñor José Paupini Nuncio de su Santidad, en fecha de 28 de mayo de 1961; finalmente es preconizado como segundo Obispo de la Diócesis de Girardot, el 24 de junio de 1961, la cual asume en presencia del representante del Santo Padre.
El nuevo Obispo, comienza su labor pastoral haciendo un análisis de la realidad, para emprender después tres líneas de trabajo: Evangelización, Liturgia y Pastoral Social, integrando así, estos esfuerzos a la Pastoral de conjunto del interior del país. Crea después, el Secretariado de Asociaciones Católicas: Acción Social, Acción Católica, Acción Cultural Popular, Legión de María, Catequesis, Educación y Misiones.
A la par de estas iniciativas, promueve encuentros de estudio de Pastoral Familiar, Relaciones Humanas, Catequesis y Pastoral de Conjunto; para las familias, establece el curso prematrimonial e inicia en Girardot, el Movimiento Familiar Cristiano, organiza también la obra Pontificia de Vocaciones.
Preocupado por el bienestar de los Sacerdotes, organiza el Consejo Presbiteral y el Consejo de Pastoral, elaborando los estatutos correspondientes, sumado a esto, busca la integración del presbiterio con el Obispo, con los religiosos y con los laicos.
El sello de su labor episcopal lo encontramos, precisamente, en la integración que siempre mantuvo con los sacerdotes: Su cercanía y cariño fueron su constante preocupación, para este fin, instituyó el martes de pascua, como El Día Sacerdotal, espacio de encuentro y comunión que siempre lo mostró como Padre.
En su buen ánimo, por atender debidamente a la feligresía, erige las Parroquias del Inmaculado Corazón de María (la Catedral) y Cristo Resucitado en Girardot, en febrero de 1963; con base en un plan denominado “iluminación”, organiza misiones también en ésta ciudad, este mismo espíritu, lo acompañara en el inicio, de una de las obras más importantes de las Diócesis, como lo fue, el comienzo de la construcción de La Catedral el 18 de Febrero de 1965; obra que estuvo bajo la dirección del arquitecto José María Useche y con planos del arquitecto Andrés Díaz Piedrahita.
A Monseñor Ciro Alfonso se debe la creación del primer órgano informativo de la Diócesis, en mayo de 1965, como lo fue el “Informativo Diocesano”, que felizmente llegó hasta 1995.
En el año de 1961 tuvo la gracia de participar con más de 2.500 Obispos de todo el mundo en las sesiones del Concilio Vaticano ll.
Después de once años de dedicada labor pastoral, y para pesar de la Diócesis el Papa Pablo VI, Con fecha 24 de julio de 1962, traslada a Monseñor Ciro Alfonso a la sede episcopal de Socorro y San Gil (Santander), como Obispo Coadjutor con derecho a sucesión. Allí murió repentinamente ya como Obispo Residencial, el 19 de enero de 1980, Se le recuerda con inmensa gratitud cariño.